Hace varios meses, cuando los de un portal alemán se me acercaron para negociar los derechos de mis columnas sindicadas, uno de los editores no resistió la tentación de preguntarme si habría manera de que de vez en cuando escribiera algo con espíritu teutón.
Vamos a divertirnos. Episodio II y final
0
24
Artículo anterior
Artículo siguiente
NOTICIAS SIMILARES