Lo admito. Jamás he usado o comprado dos playeras. Una de Los Ramones. La segunda de Misfits. Paradigmas pop de la cultura punk. La segunda de horror punk y hardcore punk formada en la ciudad de Lodi, Nueva Jersey, fundada y liderada originalmente por el cantante Glenn Danzig.
Intentamos ver a Dazing en el Force Fest en Teotihuacán. Entre el lodazal de las lluvias del viernes, sábado y domingo, de ese festival, decidimos darle al cuerpo la libertad más perdurable.
Ya éramos lodo, humedad y aire helado cortante. Encima del escenario Glen Dazing estira los músculos. Los staffs de Slayer les aplican la llave voladora. Cancelan al musculoso ex vocalista de Misfits.
Vaya sorpresa. En medio del aguacero bajan la pancarta de Dazing. Comienza a tocar Slayer en el foro adjunto.
La violencia y la velocidad de sus canciones en esa etapa fue el motivo por el cual algunas bandas de la escena del Thrash Metal como Metallica, se sintieran influenciadas y Misfits logró afinidad con ese público, aún siendo una banda histórica del punk.
El vocalista suplente, a la salida de Dazing, Michael Graves se presenta en el Café Iguana. 20 horas. Puntual. Los miembros pioneros en utilizar el maquillaje corpse paint y Jerry Only fue el inventor del estilo de peinado devilock.
El logo de la banda surge de un personaje de una serie televisiva de 1946 llamada The Crimson Ghost.
La banda ha pasado por dos etapas claramente definidas.
La primera con el vocalista y fundador Glenn Danzig hasta 1983 (el último disco en que participa Glenn es el sencillo publicado en 1984 Die, Die My Darling) y la segunda, desde 1994, primero con el vocalista Michale Graves y luego incorporando a tres integrantes de los principales grupos de punk rock de la primera ola: Marky Ramone (Ramones) en la batería, Dez Cadena (Black Flag) en la guitarra y Jerry Only como vocalista y bajista, siendo el único que ha tocado en todos los álbumes del grupo.
Hoy es el día de Graves. El set list de 27 temas, olas del mar de sudor de los asistentes. Agotados en ambos extremos, el escenario y el auditorio, el slam del horror punk y hard punk recuerda la máxima. El corazón no envejece. Solo lo hace la piel. De aquí nos vamos 20 años rejuvenecidos. De ello, ni la duda queda.