En un futuro distópico, la humanidad vive bajo un régimen militarista unificado que libra una guerra contra una raza de insectos gigantes provenientes del espacio. Johnny Rico, un joven que busca encajar y obtener la ciudadanía, decide enlistarse en la infantería. Ahí se enfrenta a combates brutales y descubre las crueles realidades de la guerra interplanetaria.
Paul Verhoeven, nacido en Ámsterdam, inicia su carrera cinematográfica con Turkish Delight, una provocadora historia sobre un escultor y sus obsesiones, que marcaría el tono de su obra: sexualidad, violencia y crítica social. Sin embargo, a mediados de los años ochenta decide emigrar a Estados Unidos, donde reconstruye por completo su trayectoria.
Un director profundamente europeo como Verhoeven es el responsable de RoboCop, una película que parte de la idea de una sociedad hiper militarizada y de una corrupción corporativa que acecha a la ciudad de Detroit. Tres años después continúa explorando los mismos temas en El Vengador del Futuro, una reflexión sobre el control, el consumismo y la pérdida de la identidad individual.
En ‘Invasión’, el cineasta lleva al extremo su ironía: satirizando la identidad bélica de Estados Unidos que se disfraza de película de acción y ciencia ficción. Los soldados compiten por demostrar su masculinidad y patriotismo en un mundo donde la violencia es celebrada y el heroísmo se mide por el número de enemigos aniquilados. Las escenas rozan lo absurdo, pero es justamente ahí donde Verhoeven coloca su comentario más afilado: una burla encubierta a la supremacía militar y al entusiasmo nacionalista.
A pesar de su apariencia de simple espectáculo bélico, Invasión fue, y sigue siendo, una de las sátiras más malinterpretadas del cine de los noventa. Fue recibida como una exaltación del heroísmo militar, cuando en realidad Verhoeven proponía una parodia incómoda sobre cómo la propaganda puede convertir la violencia en un ideal. Así, Invasión no sólo refleja una guerra del futuro, sino una fascinación humana persistente hacia las guerras.
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¿Dónde?: Disney+
Director: Paul Verhoeven
Año: 1997
Duración: 129 Minutos
Calificación: 79/100