CDMX.- La falsa austeridad de la presidenta Claudia Sheinbaum en su viaje a la cumbre del G7, en Canadá, dejó un saldo de oportunidades perdidas para México, asegura el periodista Raymundo Riva Palacio.
Hoy en su columna “Estrictamente Personal”, publicada en VANGUARDIA, Riva Palacio analiza los costos económicos y políticos del viaje hecho por la mandataria a Kananaskis, Canadá, donde se reuniría con el presidente de Estados Unidos, Donald Trump.
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“¿Cuánto nos costó a los mexicanos que dejara de gobernar o tratara a susurros asuntos de Estado en público? No se puede calcular en pesos y centavos, pero sí en desaprovechamiento de oportunidades”, refiere el editorialista.
La Presidenta mexicana eligió volar en clase turista rumbo a Calgary, Canadá, desde donde posteriormente se trasladó por tierra a Kananaskis, sede este año del G7. Lo hizo, argumenta Riva Palacio, para proyectar una imagen de austeridad ante los mexicanos.
“¿Por qué voló la presidenta Claudia Sheinbaum a Canadá en línea comercial si en sus recorridos aéreos en México utiliza aviones de la Fuerza Aérea Mexicana? La sencillez es una máscara que esconde su propaganda”, cuestiona.
Sin embargo, mientras aún estaba viajando, Trump se retiró de la cumbre y canceló la reunión bilateral programada con la mandataria mexicana, debido a la crisis en Medio Oriente. La Presidenta, según reportes, “se enteró por los medios que se cancelaría su primer encuentro cara a cara con él, previsto para el martes por la tarde”.
Si bien el periodista reconoce que no estaba en manos de Sheinbaum “evitar el regreso de Trump a la Casa Blanca”, sí advierte que perdió la oportunidad de buscar un espacio para dialogar con el republicano −quien estuvo el lunes en Kananaskis− porque ella aún estaba viajando.
“Sheinbaum no estuvo el lunes en Kananaskis, donde Trump pasó todo el día, ni tampoco su equipo, que llegó unas siete horas antes, pero no salió de Calgary”, expone.
Riva Palacio cuestiona duramente que, mientras otros líderes que también perdieron su reunión con Trump, buscaron rescatar espacios de diálogo, México no logró ni una fotografía, ni una declaración conjunta, ni un gesto diplomático.
“No tuvo (Sheinbaum) capacidad de reacción. Era muy complicado. Estaba volando en Air Canada”, critica.
Aunque la Presidenta tuvo este martes una llamada telefónica con Trump, tras la cancelación del encuentro cara a cara, para el analista el costo de la decisión de Sheinbaum de priorizar la propaganda de la austeridad sobre los asuntos de Estados costó a México la perdida de oportunidades claves para México.
Entre ellas menciona temas urgentes como la migración, las redadas, los aranceles y el combate al fentanilo.
DESMIENTE RIVA PALACIO SUPUESTA AUSTERIDAD DEL VIAJE
“Mostrar a la gradería mexicana que no es una gastalona, que no viaja con privilegios y que por eso voló en clase turista, es una falsedad”, así critica Riva Palacio el vuelo comercial de Sheinbaum a la cumbre del G7.
El periodista desmiente la supuesta austeridad del viaje que la mandataria mexicana quiso proyectar al tomar un vuelo comercial. Pues aunque Sheinbaum viajó en clase turista, su equipo y secretarios de Estado utilizaron presuntamente un jet de la Marina, dato que no ha sido desmentido.
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“Sheinbaum pagó por el boleto redondo en Air Canada 812 dólares más impuestos. Viajó acompañada por un número no revelado de colaboradores. ¿Dos? ¿Tres? Calculemos a la baja: 4. El costo estimado fue de tres mil 248 dólares más impuestos. Su comitiva, que incluía a tres secretarios de Estado, más su equipo de apoyo, no voló con ella.
“Pero para efectos de argumentación, asumamos que, en el extremo de comitiva más apoyo, viajaron 10 personas. El costo de sus boletos habría rondado en los ocho mil 120 dólares más impuestos. Pero ninguno de ellos viajó con la Presidenta”, señala.
Riva Palacio también cuestiona por qué, si ya se iba a realizar el gasto en un avión de la Marina, la Presidenta no viajó con su comitiva.
“Por mera simulación, se puede argumentar. Si viajaron en un jet ejecutivo de lujo de la Marina, se puede comparar con los costos que tiene la Fuerza Aérea Mexicana, que dependiendo del modelo, cuesta de 7 mil a 12 mil dólares la hora.
“Para tener una referencia, un jet ejecutivo para 10 personas cuesta tres mil 500 dólares la hora aproximadamente, por lo que el viaje redondo tiene un costo de 42 mil dólares, mientras que en un avión militar mexicano, al mínimo costo, sale al doble”, advierte sobre el elevado gasto.
En contraste, añade, una comitiva completa en vuelo comercial habría representado un ahorro de aproximadamente 22 mil 736 dólares. “¿Bien valen 432 mil pesos la farsa de austeridad?”, cuestiona.
Pese a ello, Riva Palacio advierte que el verdadero costo no se mide en dólares, sino en las oportunidades perdidas.