El 23 de noviembre de 2020, una plataforma militar de reconocimiento estadounidense registró imágenes inéditas en la frontera entre Afganistán y Pakistán: un objeto volador no identificado (UAP, por sus siglas en inglés) con forma de disco y un diámetro estimado entre 200 y 400 metros.
El video, desclasificado en 2025 y revelado por los periodistas Jeremy Corbell y George Knapp, muestra al objeto moviéndose con total libertad entre las nubes, sin señales visibles de propulsión ni emisiones térmicas detectables.
OVNI VALIDADO POR EL PENTÁGONO: SIN CALOR, SIN MOTORES, SIN EXPLICACIÓN
Según los analistas que presentaron las imágenes, lo más desconcertante es que el objeto no presenta ninguna fuente de energía visible. Las cámaras térmicas utilizadas por las fuerzas militares no detectaron columna alguna de calor ni combustión, lo cual descarta tecnologías de vuelo convencionales como motores a reacción.
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“No se ven columnas de calor saliendo de este objeto en forma de disco. Eso es uno de los aspectos más salvajes”, explicó Jeremy Corbell al DailyMail.com.
Además, el objeto mostró cambios de dirección abruptos y movimientos contrarios a cualquier lógica aerodinámica conocida, lo cual sugiere que operaba bajo principios de vuelo desconocidos para la ingeniería actual.
UN SECRETO QUE NO DEBÍA HACERSE PÚBLICO PERO SALIÓ A LA LUZ
El video permaneció clasificado durante casi tres años dentro de los archivos de inteligencia de EU. Fue validado y analizado en secreto por Corbell y Knapp antes de que decidieran hacerlo público.
“No se suponía que se hiciera público. Pero debería haberlo sido”, afirmó George Knapp en su podcast Weaponized.
Para los investigadores, este hallazgo representa una evidencia contundente de que ciertos fenómenos aéreos no identificados (ahora conocidos oficialmente como FANIs o UAPs) superan los límites de nuestra tecnología y comprensión actual.
DESCLASIFICACIÓN DE FANI EN EE.UU.: UN NUEVO ESCENARIO GLOBAL
Desde 2024, Estados Unidos ha comenzado a desclasificar documentos, videos y grabaciones militares relacionadas con los UAPs. El cambio de narrativa busca fomentar la transparencia y abrir el debate científico y político sobre estos fenómenos.
El caso del OVNI sobre Afganistán es el primero de gran escala validado oficialmente por el Pentágono, lo que lo convierte en un parteaguas en la historia de la ufología moderna. Se suma así a una creciente colección de evidencias visuales y testimonios de pilotos, controladores aéreos y personal militar que aseguran haber tenido contacto con objetos similares.
DATOS CURIOSOS SOBRE EL OBJETO VISTO EN AFGANISTÁN
• El objeto tiene un tamaño descomunal, con una dimensión de hasta 400 metros, el equivalente a cuatro campos de fútbol.
• Fue captado por cámaras infrarrojas militares, lo que permite descartar efectos visuales o interferencias ópticas.
• No generó emisión térmica detectable, lo que es físicamente imposible según las leyes actuales de la propulsión aérea.
• Su forma perfectamente discoidal coincide con descripciones tradicionales de OVNIs vistas desde el siglo XX.
• El término FANI (Fenómeno Aéreo No Identificado) reemplazó oficialmente al término “OVNI” en el lenguaje técnico del Pentágono.
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¿VIDA EXTRATERRESTRE O TECNOLOGÍA DESCONOCIDA?
Este avistamiento reactiva el eterno debate: ¿estamos siendo visitados por civilizaciones avanzadas? ¿O se trata de tecnologías secretas de potencias mundiales aún no reveladas?
Los expertos aún no tienen una respuesta definitiva, pero sí coinciden en que este tipo de fenómenos merecen ser estudiados científicamente y con transparencia, sin tabúes ni censura.
“El público tiene un derecho y una necesidad de saberlo. Esto es digno de un debate internacional”, sentenció Corbell.
