De acuerdo a un análisis de mercado de Quasar Elizundia, el peso mexicano bajó el martes, lastrado por las decepcionantes cifras de inversión fija y las crecientes preocupaciones sobre los ingresos del petróleo y la caída de inversiones.
“El índice IMFBCF de febrero subió sólo un 0.1% intermensual, un modesto repunte tras la fuerte caída del 1.5% de enero y muy por debajo de las expectativas”.
En términos anuales, explicó que la inversión cayó un 6.0%, lo que pone de manifiesto la persistente debilidad de la formación de capital.
TE PUEDE INTERESAR: Tiene empleo su segundo descalabro del año; pierde más de 2 mil 500 puestos de trabajo
“La caída de las importaciones de maquinaria y equipos sugiere que las empresas mantienen la cautela ante la incertidumbre del comercio mundial, lo que podría obstaculizar el crecimiento a medio plazo y reforzar la presión a la baja”, dijo.
Indicó que la debilidad de los precios mundiales y la reducción de los volúmenes de envío de petróleo se redujeron las entradas de divisas, exacerbando las vulnerabilidades externas.
Al mismo tiempo, informó que el Ministerio de Finanzas dio a conocer un plan de estímulo centrado en la contratación pública y la sustitución de importaciones, que podría respaldar la confianza y la moneda.
Por lo anterior, los inversores seguirán de cerca las publicaciones de esta semana sobre la inflación y la confianza de los consumidores. “Además, la decisión de la Reserva Federal del miércoles podría ser crucial. Un tono agresivo de la Fed podría pesar sobre el peso mexicano”, finalizó.