Los dos tramos faltantes de los trenes Querétaro-Irapuato y Saltillo-Nuevo Laredo fueron adjudicados ayer por el Gobierno federal a Mota Engil y al consorcio Ezvindi, respectivamente.
Se trata de las mismas empresas que construyeron el Tren Maya.
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Mota Engil le ganó a Grupo Carso y a un consorcio chino el tramo de 70.7 kilómetros de Apaseo El Grande a Irapuato, y previamente había obtenido el de 30.7 kilómetros de Querétaro a Apaseo.
El consorcio de Grupo INDI y la española Azvi, conocido como Azvindi, ganó el tramo de 136 km de Arroto El Sauz a Nuevo Laredo, con una oferta de 12 mil 699 millones de pesos, 35 por ciento abajo de la presentada por ICA.