Una adolescente de 13 años fue rescatada este viernes de su domicilio en la colonia Federico Berrueto Ramón, en Saltillo, tras ser presuntamente víctima de maltrato físico y amenazas por parte de su madre. La intervención ocurrió luego de que vecinos alertaran al padre de la menor, quien acudió de inmediato al sitio para auxiliar a su hija.
De acuerdo con los testimonios, alrededor de las 10:00 horas, la joven solicitó ayuda a una vecina de 12 años, a quien le confesó que su madre la había golpeado y amenazado de muerte. La menor explicó que el incidente ocurrió al regreso de su madre del trabajo, y que los abusos eran frecuentes.
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Preocupados por la situación, los vecinos se comunicaron con el padre de la adolescente, quien no vive con ella. Además, señalaron que la madre y su actual pareja —quienes se encontraban en el interior de la vivienda junto con las menores— consumen sustancias tóxicas de manera regular, lo que incrementa el riesgo para las niñas.
Al llegar las autoridades, el domicilio se encontraba cerrado con llave, por lo que se solicitó permiso al hombre adulto presente para ingresar. Tras obtener la autorización legal correspondiente, se solicitó la presencia del cuerpo de bomberos, quienes en minutos arribaron al sitio, forzaron la entrada y extrajeron a ambas menores.
En un momento de emotividad, la menor corrió a los brazos de su padre al ser rescatada. Posteriormente, fueron trasladados a bordo de una patrulla a las instalaciones de seguridad pública y más tarde a la Procuraduría para los Niños, las Niñas y la Familia (Pronnif), donde se abrirá una investigación para determinar si procede un cambio en la custodia legal.
Aunque inicialmente se habló de una posible privación ilegal de la libertad, esta versión fue descartada por las autoridades debido a que la madre cuenta legalmente con la custodia. La otra menor —vecina de la adolescente— había sido dejada ahí por su padre para su cuidado, ya que este se encontraba en horario laboral.
Los vecinos insistieron en que los maltratos por parte de la madre son constantes y que su estilo de vida pone en riesgo la integridad de la menor. Por lo pronto, la adolescente permanecerá bajo el resguardo de la autoridad competente mientras se determina su situación jurídica y familiar.
