La tarde del martes 24 de junio, autoridades localizaron sin vida a un hombre identificado como Humberto Villanueva, de 57 años, en un domicilio de la calle Tizoc 1660, en la colonia Anáhuac, al poniente de Saltillo. Tras las diligencias forenses, se confirmó que el fallecimiento fue consecuencia de un infarto agudo al miocardio.
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El caso causó inquietud entre vecinos, debido a que el cuerpo presentaba lesiones visibles en el cráneo, rostro y espalda, las cuales fueron evaluadas por peritos de la Fiscalía General del Estado. Sin embargo, el informe del Servicio Médico Forense (Semefo) concluyó que dichas heridas no causaron su muerte y fueron producto de caídas sufridas con anterioridad.
De acuerdo con la declaración de un testigo identificado como Gonzalo, el día anterior al hallazgo, alrededor de las 17:30 horas, Humberto le pidió resguardarse en el exterior de su domicilio tras decir que había sido golpeado. Aseguró que le permitió ocupar el espacio afuera de una habitación.
El testigo también relató que notó a Humberto en mal estado físico, con dificultad para desplazarse, ya que se movía gateando debido a sus condiciones de salud. Esa fue la última vez que tuvo contacto con él.
El cuerpo fue trasladado al Semefo para descartar causas violentas. Tras la necropsia, se confirmó que el deceso se debió a causas naturales. Las autoridades cerraron el caso sin indicios de homicidio.
